viernes, 29 de junio de 2012

Y Líbranos del mal

VII Y Líbranos del mal 2850 La última petición a nuestro Padre está también contenida en la oración de Jesús: "No te pido que los retires del mundo, sino que los guardes del Maligno" (Jn 17, 15). Esta petición concierne a cada uno individualmente, pero siempre quien ora es el "nosotros", en comunión con toda la Iglesia y para la salvación de toda la familia humana. La oración del Señor no cesa de abrirnos a las dimensiones de la economía de la salvación. Nuestra interdependencia en el drama del pecado y de la muerte se vuelve solidaridad en el Cuerpo de Cristo, en "comunión con los santos" (cf RP 16). 2851 En esta petición, el mal no es una abstracción, sino que designa una persona, Satanás, el Maligno, el ángel que se opone a Dios. El "diablo" ["dia-bolos"] es aquél que "se atraviesa" en el designio de Dios y su obra de salvación cumplida en Cristo. 2852 "Homicida desde el principio, mentiroso y padre de la mentira" (Jn 8, 44), "Satanás, el seductor del mundo entero" (Ap 12, 9), es aquél por medio del cual el pecado y la muerte entraron en el mundo y, por cuya definitiva derrota, toda la creación entera será "liberada del pecado y de la muerte" (MR, Plegaria Eucarística IV). "Sabemos que todo el que ha nacido de Dios no peca, sino que el Engendrado de Dios le guarda y el Maligno no llega a tocarle. Sabemos que somos de Dios y que el mundo entero yace en poder del Maligno" (1 Jn 5, 18-19): El Señor que ha borrado vuestro pecado y perdonado vuestras faltas también os protege y os gua rda contra las astucias del Diablo que os combate para que el enemigo, que tiene la costumbre de engendrar la falta, no os sorprenda. Quien confía en Dios, no tema al Demonio. "Si Dios está con nosotros, ¿quién estará contra nosotros?" (Rm 8, 31) (S. Ambrosio, sacr. 5, 30). 2853 La victoria sobre el "príncipe de este mundo" (Jn 14, 30) se adquirió de una vez por todas en la Hora en que Jesús se entregó libremente a la muerte para darnos su Vida. Es el juicio de este mundo, y el príncipe de este mundo está "echado abajo" (Jn 12, 31; Ap 12, 11). "El se lanza en persecución de la Mujer" (cf Ap 12, 13-16), pero no consigue alcanzarla: la nueva Eva, "llena de gracia" del Espíritu Santo es preservada del pecado y de la corrupción de la muerte (Concepción inmaculada y Asunción de la santísima Madre de Dios, María, siempre virgen). "Entonces despechado contra la Mujer, se fue a hacer la guerra al resto de sus hijos" (Ap 12, 17). Por eso, el Espíritu y la Iglesia oran: "Ven, Señor Jesús" (Ap 22, 17. 20) ya que su Venida nos librará del Maligno. 2854 Al pedir ser liberados del Maligno, oramos igualmente para ser liberados de todos los males, presentes, pasados y futuros de los que él es autor o instigador. En esta última petición, la Iglesia presenta al Padre todas las desdichas del mundo. Con la liberación de todos los males que abruman a la humanidad, implora el don precioso de la paz y la gracia de la espera perseverante en el retorno de Cristo. Orando así, anticipa en la humildad de la fe la recapitulación de todos y de todo en Aquél que "tiene las llaves de la Muerte y del Hades" (Ap 1,18), "el Dueño de todo, Aquél que es, que era y que ha de venir" (Ap 1,8; cf Ap 1, 4): Líbranos de todos los males, Señor, y concédenos la paz en nuestros días, para que, ayudados por tu misericordia, vivamos siempre libres de pecado y protegidos de toda perturbación, mientras esperamos la gloriosa venida de nuestro Salvador Jesucristo (MR, Embolismo). http://www.ewtn.com/library/catechsm/spanish/p4s2a3.asp#VII Y Líbranos del mal

Corte Suprema de Estados Unidos ratifica ley de salud de Obama

Corte Suprema de Estados Unidos ratifica ley de salud de Obama


Washington, 28 Jun. 12 / 02:30 pm (ACI/EWTN Noticias).- La Corte Suprema de EE.UU. ratificó hoy la Patient Protection and Affordable Care Act (Ley de Sanidad Asequible y Protección al Paciente) del Gobierno de Barack Obama, generando decepción y preocupación por atentar contra la libertad religiosa y la causa pro-vida en todo el país.
Christen Varley, directora ejecutiva de Causa Consciencia –una organización independiente que defiende la libertad religiosa-, señaló que estaba "muy decepcionada" con la decisión de los magistrados.
"La primera línea de la Primera Enmienda de nuestra Constitución garantiza a todos los americanos el derecho a la libertad religiosa", expresó. Añadió que con esta decisión se ha abierto "la puerta a un gobierno que no ve límites a la cantidad de libertades que puede quitar".
Con cinco votos a favor y cuatro en contra, la Corte declaró que la ley de salud de Obama es constitucional, incluyendo un mandato individual que obliga a todos los ciudadanos a comprar planes de seguros de salud, aunque incluyan anticoncepción y aborto.
El fallo también señala que la gente que se niegue a comprar un seguro de salud, deberá pagar una penalidad, entendida como una especie de impuesto que el Congreso está autorizado a imponer en virtud de su potestad tributaria.
La decisión significa que la pelea contra este mandato que promueve la contracepción continuará. La norma habría perecido automáticamente si la ley hubiera sido declarada inconstitucional.
El polémico mandato obligará a los empleadores a ofrecer seguros de salud que cubran la contracepción, esterilización y medicamentos que inducen al aborto, aún si se viola la libertad de conciencia.
Como se recuerda, este mandato provocó las críticas de personalidades, políticos y organizaciones católicas. Se presentaron más de 50 demandas contra esta norma a nivel nacional.
Los obispos de diversas diócesis de Estados Unidos hablaron contra este mandato, advirtiendo que es una severa amenazada a la libertad religiosa de los que se oponen a este texto.
Varley dijo que este mandato representa una "afrenta flagrante contra la libertad religiosa" y aseguró que su organización continuará trabajando con gente de todas las confesiones para pedir al Congreso que "haga caso omiso de esta política devastadora que pone en riesgo la libertad religiosa".

jueves, 28 de junio de 2012

Gobierno de Malasia permite a cristianos usar Biblias con palabra "Allah" :: EWTN News

Gobierno de Malasia permite a cristianos usar Biblias con palabra "Allah" :: EWTN News

El Gobierno de Malasia dio permiso para que más de 5.000 Biblias escritas en lengua Bahasha Malaysia, que contienen la palabra "Allah" para referirse a Dios, puedan ser usadas por comunidades cristianas de Borneo.


Según informaron fuentes locales a Fides, las autoridades concedieron una excepción a las comunidades cristianas de las provincias de Sabah, Sarawak y el territorio federal de la isla de Labuan en Malasia, ya que aún no cesa la denuncia legal iniciada por la Iglesia hace dos años reclamando el uso de la palabra "Allah", que el Gobierno había prohibido afirmando que solo podía ser usada por los musulmanes.



El proceso judicial en primera instancia terminó con un veredicto a favor de la Iglesia, pero el Gobierno apeló y, mientras tanto, el tribunal suspendió el uso y la difusión de las Biblias.



En las provincias de Borneo, donde hay una masiva presencia de cristianos, las autoridades locales permitieron la libre circulación de más de 5.000 copias de la versión antigua de la Biblia en lengua malaya, llamada "Alkitab", que estaban bloqueadas en las aduanas de los puertos de Klang y Kuching.



La traducción de la Biblia "Alkitab" cumplió recientemente 400 años, por lo que los cristianos locales utilizaron durante siglos la palabra "Allah" para referirse a Dios, "mucho antes de la formación de Malasia, creada en 1963", según señalaron fuentes de Fides.



En 1612, el erudito cristiano Albert Corneliszn Ruyl fue quien completó la traducción del Evangelio de Mateo en el lenguaje Bahasha Malaysia, y la primera publicación de la traducción se realizó en 1629, en un texto que contenía también los diez mandamientos, oraciones, salmos e himnos.

miércoles, 27 de junio de 2012

SÉPTIMA REGLA DE SAN BENITO

VII. LA HUMILDAD 1 La divina escritura, hermanos, nos dice a gritos: «Todo el que se ensalza será humillado y el que se humilla será ensalzado». 2 Con estas palabras nos muestra que toda exaltación de sí mismo es una forma de soberbia. 3 El profeta nos indica que él la evitaba cuando nos dice: «Señor, mi corazón no es ambicioso, ni mis ojos altaneros; no pretendo grandezas que superan mi capacidad». 4 Pero ¿qué pasará «si no he sentido humildemente de mí mismo, si se ha ensoberbecido mi alma? Tratarás a mi alma como al niño recién destetado, que está penando en los brazos de su madre». 5 Por tanto, hermanos, si es que deseamos ascender velozmente a la cumbre de la más alta humildad y queremos llegar a la exaltación celestial a la que se sube a través de la humildad en la vida presente, 6 hemos de levantar con los escalones de nuestras obras aquella misma escala que se le apareció en sueños a Jacob, sobre la cual contempló a los ángeles que bajaban y subían. 7 Indudablemente, a nuestro entender, no significa otra cosa ese bajar y subir sino que por la altivez se baja y por la humildad se sube. 8 La escala erigida representa nuestra vida en este mundo. Pues, cuando el corazón se abaja, el Señor lo levanta hasta el cielo. 9 Los dos largueros de esta escala son nuestro cuerpo y nuestra alma, en los cuales la vocación divina ha hecho encajar los diversos peldaños de la humildad y de la observancia para subir por ellos.10 Y así, el primer grado de humildad es que el monje mantenga siempre ante sus ojos el temor de Dios y evite por todos los medios echarlo en olvido; 11 que recuerde siempre todo lo que Dios ha mandado y medite constantemente en su espíritu cómo el infierno abrasa por sus pecados a los que menosprecian a Dios y que la vida eterna está ya preparada para los que le temen. 12 Y, absteniéndose en todo momento de pecados y vicios, esto es, en los pensamientos, en la lengua, en las manos, en los pies y en la voluntad propia, y también en los deseos de la carne, 13 tenga el hombre por cierto que Dios le está mirando a todas horas desde el cielo, que esa mirada de la divinidad ve en todo lugar sus acciones y que los ángeles le dan cuenta de ellas a cada instante. 14 Esto es lo que el profeta quiere inculcarnos cuando nos presenta a Dios dentro de nuestros mismos pensamientos al decirnos: «Tú sondeas, ¡oh Dios!, el corazón y las entrañas». 15 Y también: «El Señor conoce los pensamientos de los hombres». 16 Y vuelve a decirnos: «De lejos conoces mis pensamientos». 17 Y en otro lugar dice: «El pensamiento del hombre se te hará manifiesto». 18 Y para vigilar alerta todos sus pensamientos perversos, el hermano fiel a su vocación repite siempre dentro de su corazón: «Solamente seré puro en su presencia si sé mantenerme en guardia contra mi iniquidad». 19 En cuanto a la propia voluntad, se nos prohíbe hacerla cuando nos dice la Escritura: «Refrena tus deseos». 20 También pedimos a Dios en la oración «que se haga en nosotros su voluntad». 21 Pero que no hagamos nuestra propia voluntad se nos avisa con toda la razón, pues así nos libramos de aquello que dice la Escritura santa: «Hay caminos que les parecen derechos a los hombres, pero al fin van a parar a la profundidad del infierno». 22 Y también por temor a que se diga de nosotros lo que se afirma de los negligentes: «Se corrompen y se hacen abominables en sus apetitos». 23 Cuando surgen los deseos de la carne, creemos también que Dios está presente en cada instante, como dice el profeta al Señor: «Todas mis ansias están en tu presencia». 24 Por eso mismo, hemos de precavernos de todo mal deseo, porque la muerte está apostada al umbral mismo del deleite. 25 Así que nos dice la Escritura: «No vayas tras tus concupiscencias». 26 Luego si «los ojos del Señor observan a buenos y malos», si «el Señor mira incesantemente a todos los hombres para ver si queda algún sensato que busque a Dios» 28 y si los ángeles que se nos han asignado anuncian siempre día y noche nuestras obras al Señor, 29 hemos de vigilar, hermanos, en todo momento, como dice el profeta en el salmo, para que Dios no nos descubra cómo «nos inclinamos del lado del mal y nos hacemos unos malvados»; 30 y, aunque en esta vida nos perdone, porque es bueno, esperando a que nos convirtamos a una vida más digna, tenga que decirnos en la otra: «Esto hiciste, y callé». 31 El segundo grado de humildad es que el monje, al no amar su propia voluntad, no se complace en satisfacer sus deseos, 32 sino que cumple con sus obras aquellas palabras del Señor: «No he venido para hacer mi voluntad, sino la del que me ha enviado». 33 Y dice también la Escritura: «La voluntad lleva su castigo y la sumisión reporta una corona». 34 El tercer grado de humildad es que el monje se someta al superior con toda obediencia por amor a Dios, imitando al Señor, de quien dice el Apóstol: «Se hizo obediente hasta la muerte». 35 El cuarto grado de humildad consiste en que el monje se abrace calladamente con la paciencia en su interior en el ejercicio de la obediencia, en las dificultades y en las mayores contrariedades, e incluso ante cualquier clase de injurias que se le infieran, 36 y lo soporte todo sin cansarse ni echarse para atrás, pues ya lo dice la Escritura: «Quien resiste hasta el final se salvará». 37 Y también: «Cobre aliento tu corazón y espera con, paciencia al Señor». 38 Y cuando quiere mostrarnos cómo el que desea ser fiel debe soportarlo todo por el Señor aun en las adversidades, dice de las personas que saben sufrir: «Por ti estamos a la muerte todo el día, nos tienen por ovejas de matanza». 39 Mas con la seguridad que les da la esperanza de la recompensa divina, añaden estas palabras: «Pero todo esto lo superamos de sobra gracias al que nos amó». 40 Y en otra parte dice también la Escritura: «¡Oh Dios!; nos pusiste a prueba, nos refinaste en el fuego como refinan la plata, nos empujaste a la trampa, nos echaste a cuestas la tribulación». 41 Y para convencernos de que debemos vivir bajo un superior, nos dice: «Nos has puesto hombres que cabalgan encima de nuestras espaldas». 42 Además cumplen con su paciencia el precepto del Señor en las contrariedades e injurias, porque, cuando les golpean en una mejilla, presentan también la otra; al que les quita la túnica, le dejan también la capa; si le requieren para andar una milla, le acompañan otras dos; 43 como el apóstol Pablo, soportan la persecución de los falsos hermanos y bendicen a los que les maldicen. 44 El quinto grado de humildad es que el monje con una humilde confesión manifieste a su abad los malos pensamientos que le vienen al corazón y las malas obras realizadas ocultamente. 45 La Escritura nos exhorta a ello cuando nos dice: «Manifiesta al Señor tus pasos y confía en él». 46 Y también dice el profeta: «Confesaos al Señor, porque es bueno, porque es eterna su misericordia». 47 Y en otro lugar dice: «Te manifesté mi delito y dejé de ocultar mi injusticia. 48 Confesaré, dije yo, contra mí mismo al Señor mi propia injusticia, y tú perdonaste la malicia de mi pecado». 49 El sexto grado de humildad es que el monje se sienta contento con todo lo que es más vil y abyecto y que se considere a sí mismo como un obrero malo e indigno para todo cuanto se le manda, 50 diciéndose interiormente con el profeta: «Fui reducido a la nada sin saber por qué; he venido a ser como un jumento en tu presencia, pero yo siempre estaré contigo». 51 El séptimo grado de humildad es que, no contento con reconocerse de palabra como el último y más despreciable de todos, lo crea también así en el fondo de su corazón, 52 humillándose y diciendo como el profeta: «Yo soy un gusano, no un hombre; la vergüenza de la gente, el desprecio del pueblo». 53 «Me he ensalzado, y por eso me veo humillado y abatido». 54 Y también: «Bien me está que me hayas humillado, para que aprenda tus justísimos preceptos». 55 El octavo grado de humildad es que el monje en nada se salga de la regla común del monasterio, ni se aparte del ejemplo de los mayores. 56 El noveno grado de humildad es que el monje domine su lengua y, manteniéndose en la taciturnidad, espere a que se le pregunte algo para hablar, 57 ya que la Escritura nos enseña que «en el mucho hablar no faltará pecado» 58 y que «el deslenguado no prospera en la tierra». 59 El décimo grado de humildad es que el monje no se ría fácilmente y en seguida, porque está escrito: «El necio se ríe estrepitosamente». 60 El undécimo grado de humildad es que el monje hable reposadamente y con seriedad, humildad y gravedad, en pocas palabras y juiciosamente, sin levantar la voz, 61 tal como está escrito: «Al sensato se le conoce por su parquedad de palabras». 62 El duodécimo grado de humildad es que el monje, además de ser humilde en su interior, lo manifieste siempre con su porte exterior a cuantos le vean; 63 es decir, que durante la obra de Dios, en el oratorio, dentro del monasterio, en el huerto, cuando sale de viaje, en el campo y en todo lugar, sentado, de pie o al andar, esté siempre con la cabeza baja y los ojos fijos en el suelo. 64 Y, creyéndose en todo momento reo de sus propios pecados, piensa que se encuentra ya en el tremendo juicio de Dios, 65 diciendo sin cesar en la intimidad de su corazón lo mismo que aquel recaudador de arbitrios decía con la mirada clavada en tierra: «Señor, soy tan pecador, que no soy digno de levantar mis ojos hacia el cielo». 66 Y también aquello del profeta: «He sido totalmente abatido y humillado». 67 Cuando el monje haya remontado todos estos grados de humildad, llegará pronto a ese grado de «amor a Dios que, por ser perfecto, echa fuera todo temor»; 68 gracias al cual, cuanto cumplía antes no sin recelo, ahora comenzará a realizarlo sin esfuerzo, como instintivamente y por costumbre; 69 no ya por temor al infierno, sino por amor a Cristo, por cierta santa connaturaleza y por la satisfacción que las virtudes producen por sí mismas. 70 Y el Señor se complacerá en manifestar todo esto por el Espíritu Santo en su obrero, purificado ya de sus vicios y pecados. http://www.sbenito.org/regla/rb.htm#

El hombre se realiza plenamente cuando hace la voluntad de Dios, afirma Benedicto XVI

El hombre se realiza plenamente cuando hace la voluntad de Dios, afirma Benedicto XVI


VATICANO, 27 Jun. 12 / 10:12 am (ACI/EWTN Noticias).- Esta mañana, durante la Audiencia General de los miércoles, el Papa Benedicto XVI lamentó que en ocasiones el hombre crea tener el poder de Dios, pero recordó que la plena realización está en hacer la voluntad del Padre sirviendo con caridad a los demás.
El Santo Padre subrayó que a menudo la lógica humana "intenta la realización de sí mismo en el poder, en el dominio, en los medios poderosos. El hombre sigue queriendo construir con sus propias fuerzas la torre de Babel para llegar a la altura de Dios, para ser como Dios. La Encarnación y la Cruz nos recuerdan que la realización plena está en conformar la voluntad humana a la del Padre, en el desapego total de uno mismo, del propio egoísmo, para llenarse del amor y de la caridad de Dios y, así, llegar a ser verdaderamente capaces de amar a los demás".
"Adán quería imitar a Dios, pero tenía una idea equivocada de Dios. Dios no quiere sólo la grandeza, Dios es amor que da, ya desde la Trinidad y luego en la Creación. Imitar a Dios significa salir de sí mismo y entregarse en el amor", "sólo si logramos salir de nosotros, nos encontramos", agregó.
En este sentido, explicó que en la oración, en la relación con Dios, debemos abrir "la mente, el corazón y la voluntad a la acción del Espíritu Santo, para entrar en esta misma dinámica de vida".
"Nuestra oración está hecha, como hemos visto en los pasados miércoles, de silencio y de palabras, de canto y de gestos que implican a toda la persona: desde la boca hasta la mente, del corazón a todo el cuerpo. Es una característica que encontramos en la oración judía, especialmente en los Salmos", dijo el Santo Padre al referirse a "uno de los cantos o himnos más antiguos de la tradición cristiana, que San Pablo nos presenta en lo que, en cierto sentido, es su testamento espiritual: la Carta a los Filipenses".
Benedicto XVI recordó que San Pablo escribe esta carta mientras está en la cárcel condenado a muerte, y "expresa la alegría de ser discípulo de Cristo, de poder ir a su encuentro, hasta el punto de ver la muerte no como una pérdida, sino como una ganancia".
San Pablo, a través de su carta invita a la alegría, "una característica fundamental –recordó-, de nuestro ser cristianos y de nuestra orar".
"’Estad siempre alegres en el Señor, lo repito de nuevo: ¡Alegraos!’. Pero, ¿cómo puede regocijarme frente a una sentencia de muerte ya inminente? ¿De dónde, o mejor dicho, de quién San Pablo recoge la serenidad, la fuerza, el coraje de ir hacia su martirio y al derramamiento de sangre?".
El Papa explicó que la respuesta está en el canto para Cristo, más conocido como el himno cristológico, "un canto que centra toda la atención en los sentimientos de Cristo, es decir, en su modo de pensar y su actitud concreta vivida".
Benedicto XVI dijo que estos sentimientos son el amor, la generosidad, la humildad, la obediencia a Dios, y el darse a uno mismo, "no se trata simplemente de seguir el ejemplo de Jesús como algo moral, sino de volcar toda la existencia en su propia manera de pensar y actuar".
Dentro de este marco, el Papa recordó a los fieles que la oración "debe llevar hacia un conocimiento y una unión en el amor cada vez más profunda con el Señor, para poder pensar, actuar y amar como Él, en Él y por Él".
"Ejercitarse en eso, aprender los sentimientos de Jesús es el camino de la vida cristiana", subrayó.
Además, Benedicto XVI indicó que este canto condensa todo "el itinerario divino y humano del Hijo de Dios, que abarca toda la historia humana: del ser en la condición de Dios, a la encarnación, a la muerte en una cruz y a la exaltación en la gloria del Padre, y en parte también el comportamiento de Adán, del hombre desde el principio".
"El verdadero Dios y verdadero hombre, no vive su ‘ser como Dios’ para triunfar o para imponer su supremacía, no lo considera como una posesión, un privilegio, un tesoro al qué aferrarse. Sino que ‘se desnudó’, se vació de sí mismo tomando –como dice el texto griego, la ‘morphe Doulos’, la ‘forma de siervo, de esclavo’, una realidad humana marcada por el sufrimiento, la pobreza, y la muerte".
El Papa explicó que Cristo "se asemejó en todo a los hombres excepto en el pecado, comportándose como un servidor dedicado completamente al servicio de los demás", y en este sentido "tomó sobre sí las fatigas junto a los miembros que sufren. Hizo suyas nuestras humildes enfermedades, y sufrió tormentos por amor a nosotros: esto en conformidad con su gran amor por la humanidad".
El Hijo de Dios "se hizo verdaderamente hombre y cumplió un camino en completa obediencia y fidelidad a la voluntad del Padre, hasta el supremo sacrificio de su vida", y "se humilló hasta aceptar por obediencia la muerte y la muerte de cruz", dijo al recordar las palabras del Apóstol.
"En la cruz Jesucristo alcanzó el mayor grado de humillación, ya que la crucifixión era el castigo reservado a los esclavos y no a las personas libres", recordó.
"En la cruz de Cristo, el hombre es redimido, y la experiencia de Adán se modifica, dándose la vuelta completamente: Adán, creado a imagen y semejanza de Dios, pretendía ser como Dios, con sus propias fuerzas, ocupar el lugar de Dios, y así perdió la dignidad original que se le había dado. Jesús, sin embargo, aun estando en la condición divina, se rebajó, se sumergió en la condición humana, en total fidelidad al Padre, para redimir al Adán que llevamos dentro para volverle a dar al hombre la dignidad que había perdido", afirmó.
De este modo, el Santo Padre reiteró su llamado a imitar a Jesús, que volvió "a dar a la naturaleza humana a través de su humanidad y obediencia, lo que se había perdido por la desobediencia de Adán".
Finalmente, en su saludo a los peregrinos de lengua española, el Santo Padre los invitó a "fijar durante la oración la mirada en el Crucifijo, a detenerse más a menudo para la adoración Eucarística y así entrar en el amor de Dios, que se ha rebajado con humildad para elevarnos hacia Él".

martes, 26 de junio de 2012

«Entrad por la puerta estrecha»

Comentario del Evangelio de hoy por : San Benito (480-547), monje La Regla, Prólogo «Entrad por la puerta estrecha» El Señor, buscándose, entre la multitud a la cual dirige su llamada, un obrero, dice: «¿Quién es el que ama la vida y desea días de prosperidad?» (Sl 33,13). Si escuchando esto respondes: «¡Yo!», Dios te dice: «Si quieres alcanzar la vida, la verdadera vida eterna, guarda tu lengua del mal, tus labios de la falsedad, apártate del mal, obra el bien, busca la paz y corre tras ella» (Sl 33, 14-15)... ¿Qué hay que sea más dulce, hermanos muy amados, que esta voz del Señor que nos invita? Mirad que, en su bondad, el Señor nos indica el camino de la vida. Habiendo, pues, ceñido nuestros lomos (Ef 6,14) con la fe y la práctica de las buenas obras, guiados por el Evangelio, avancemos en sus caminos, a fin de que merezcamos ver a aquél que nos ha llamado a su Reino (1Tes 2,12). Si queremos habitar en las moradas de este Reino, no llegaremos de ninguna manera a él si no es por las buenas obras. Con el profeta, preguntemos al Señor y digámosle: «Señor, ¿quién puede hospedarse en tu tienda? ¿Quién habitará en tu monte santo?» (Sl 14,1). Después de esta petición, hermanos, escuchemos al Señor que nos responde mostrándonos el camino... Vamos, pues, a establecer una escuela al servicio del Señor, en la cual esperamos no establecer nada riguroso, nada agobiante. Pero si se presentara alguna cosa un tanto severa, exigida por una razón de justicia a causa de la corrección de los vicios o para mantener la caridad, no huyas inmediatamente, preso de terror, pues no nos podemos comprometer en el camino de la salvación de otra manera que por una puerta estrecha. Por otra parte, gracias al progreso de la vida y de la fe, se corre por los caminos de los mandamientos del Señor (Sl 118,32) con el corazón dilatado, en una inefable dulzura de amor. Así, no alejándonos jamás de su enseñanza y perseverando en su doctrina hasta la muerte en el monasterio, por la paciencia participaremos en los sufrimientos de Cristo (1P 4,13) para que merezcamos tener también parte en su Reino.

miércoles, 20 de junio de 2012

Asistencia en el respeto de la libertad

Asistencia en el respeto de la libertad Washington, 20. Nuevos llamamientos en Estados Unidos para exhortar a las autoridades federales a realizar modificaciones a la reforma sanitaria de modo que asegure el respeto de la libertad de conciencia. Se recuerda que la reforma del sistema sanitario,presentada por la Administración Obama, prevé que los planes de seguros para los trabajadores de cualquier organización incluyan servicios mínimos obligatorios, entre los cuales se han recogido los abortivos. El dicasterio para la salud y los servicios humanos han promulgado una directiva con líneas guía en consecuencia de las cuales sólo en un número restringido de casos, una organización, aun bajo gestión religiosa, puede ser eximida de pagar por los propios trabajadores tales servicios sanitarios. De hecho, tales «servicios» prevén intervenciones quirúrgicas para la esterilización, la prescripción de todos los contraceptivos presentes en los elencos de la Administración de Alimentos y Medicamentos, incluidos fármacos que provocan el aborto en el curso de las primeras semanas de embarazo. La Asociación católica de la salud (Cha), la asociación católica de asistencia sanitaria más grande en el país, guiada por la presidenta, sor Carol Keehan, dirigió una invitación a la Administración para que se alargue la franja de exención incluyendo instituciones y organizaciones, como hospitales y otras estructuras que «compartan vínculos comunes y convicciones con una comunidad religiosa». En cambio, en la reforma sólo aquellas organizaciones religiosas que contratan a trabajadores afiliados a su propio credo o que ofrecen servicios dirigidos principalmente a servir a personas afiliadas a la propia religión podrán oponerse a las nuevas directivas de forma legítima. Por ello, en este ámbito quedarían fuera muchas estructuras sanitarias que, aun ofreciendo una obra fundamental, no entrarían en los rígidos parámetros establecidos por el Gobierno. 21 de junio de 2012 Fuente

martes, 19 de junio de 2012

Instrumentum Laboris de la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos

VATICANO, 19 Jun. 12 / 10:47 am (ACI/EWTN Noticias).- Esta mañana fue presentado en la Sala de Prensa de la Santa Sede el Instrumentum Laboris de la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos que se realizará del 7 al 28 de octubre y abordará el tema "La Nueva Evangelización para la transmisión de la fe cristiana". En el acto estuvieron presentes Mons. Nikola Eterovic y Mons. Fortunato Frezza, Secretario General y Subsecretario del Sínodo respectivamente. Durante la presentación, Mons. Eterovic señaló que la transmisión de la fe cristiana es uno de los grandes desafíos de la Iglesia "que será profundizado en el contexto de la nueva evangelización". Ese sentido, destacó que el Sínodo de los Obispos se realice en el contexto del Año de la Fe que comenzará el 11 de octubre. Sobre el Instrumentum laboris, explicó que este consta, además del Prefacio, de una Introducción, cuatro capítulos y una Conclusión. Indicó que la Introducción recoge el parecer de las Conferencias Episcopales que concuerdan en "la necesidad de nuevos instrumentos y expresiones para hacer comprensible la Palabra de Dios en los ambientes de vida de la humanidad contemporánea. El evento sinodal tendría que representar una ocasión de debate y de participación, tanto del análisis como de las acciones que compartir para alentar a los pastores y a las iglesias particulares". Asimismo, señaló que el primer capítulo, titulado "Jesucristo, Evangelio de Dios para el hombre", reitera el núcleo central de la fe cristiana y propone el Evangelio de Jesucristo como Buena noticia para el hombre contemporáneo. "La nueva evangelización es la expresión de la dinámica interna del cristianismo, que desea dar a conocer a los hombres de buena voluntad la 'profundidad de la riqueza, de la sabiduría y del conocimiento' del misterio de Dios revelado en Jesucristo, más que una ansiosa respuesta ante la crisis de la fe y los nuevos desafíos que el mundo actual plantea a la Iglesia", indicó. El segundo capítulo aborda el "Tiempo de nueva evangelización" y señala los desafíos y la descripción de la nueva evangelización en el mundo contemporáneo, descritos con varios escenarios. "La Iglesia está llamada a discernir tales escenarios para transformarlos en lugares para el anuncio del Evangelio y de experiencia eclesial (...) En la obra de nueva evangelización, se desea una renovación de la pastoral ordinaria de las Iglesias particulares y, al mismo tiempo, se espera en una nueva sensibilidad que requiere creatividad y audacia evangélica, hacia las personas que se han alejado de la Iglesia", señaló. Mons. Eterovic dijo que muchas de las respuestas se refieren a la "falta de vocaciones para el sacerdocio y la vida consagrada, que requiere, por otra parte, una fuerte pastoral vocacional". El tercer capítulo se titula "Transmitir la fe" y recuerda que esta es la finalidad de la nueva evangelización. También advierte que "los obstáculos a la fe pueden ser internos a la Iglesia (una fe vivida de forma pasiva y privada, el rechazo de una educación de la fe propia, una separación entre fe y vida) o fuera de la vida cristiana (la secularización, el nihilismo, el consumismo, el hedonismo)". "El Año de la Fe representa un llamamiento urgente a la conversión para que cada cristiano y cada comunidad, transformados por la gracia, den abundantes frutos. Entre estos, el esfuerzo ecuménico, la búsqueda de la verdad, el diálogo interreligioso, la valentía para denunciar las infidelidades y los escándalos en la comunidad cristiana", afirmó. Finalmente el último capítulo titulado "Reavivar la acción pastoral" propone recurrir a los instrumentos usados durante la tradición evangelizadora de la Iglesia, "en particular, el primer anuncio, la iniciación cristiana y la educación, intentando adaptarlos a las condiciones culturales y sociales actuales". "Habría que entender mejor, desde el punto de vista teológico, la secuencia de los sacramentos de iniciación cristiana que culmina en la Eucaristía y reflexionar sobre los modelos para poner en práctica la profundización deseada", señala. Mons. Eterovic dijo que en conclusión se reafirma que "nueva evangelización significa dar razón de nuestra fe, comunicando el Logos de la esperanza al mundo que aspira a la salvación". http://www.aciprensa.com/noticia.php?n=37348

lunes, 11 de junio de 2012

HA LLEGADO CARTA

CARTA A LOS EFESIOS Capítulo 6 1 Hijos, obedezcan a sus padres en el Señor porque esto es lo justo, 2 ya que el primer mandamiento que contiene una promesa es este: Honra a tu padre y a tu madre, 3 para que seas feliz y tengas una larga vida en la tierra. 4 Padres, no irriten a sus hijos; al contrario, edúquenlos, corrigiéndolos y aconsejándolos, según el espíritu del Señor. 5 Esclavos, obedezcan a sus patrones con temor y respeto, sin ninguna clase de doblez, como si sirvieran a Cristo; 6 no con una obediencia fingida que trata de agradar a los hombres, sino como servidores de Cristo, cumpliendo de todo corazón la voluntad de Dios. 7 Sirvan a sus dueños de buena gana, como si se tratara del Señor y no de los hombres, 8 teniendo en cuenta que el Señor retribuirá a cada uno el bien que haya hecho, sea un esclavo o un hombre libre. 9 Y ustedes, patrones, compórtense de la misma manera con sus servidores y dejen a un lado las amenazas, sabiendo que el Señor de ellos, que lo es también de ustedes, está en el cielo, y no hace acepción de personas. 10 Por lo demás, fortalézcanse en el Señor con la fuerza de su poder. 11 Revístanse con la armadura de Dios, para que puedan resistir las insidias del demonio. 12 Porque nuestra lucha no es contra enemigos de carne y sangre, sino contra los Principados y Potestades, contra los Soberanos de este mundo de tinieblas, contra los espíritus del mal que habitan en el espacio. 13 Por lo tanto, tomen la armadura de Dios, para que puedan resistir en el día malo y mantenerse firmes después de haber superado todos los obstáculos. 14 Permanezcan de pie, ceñidos con el cinturón de la verdad y vistiendo la justicia como coraza. 15 Calcen sus pies con el celo para propagar la Buena Noticia de la paz. 16 Tengan siempre en la mano el escudo de la fe, con el que podrán apagar todas las flechas encendidas del Maligno. 17 Tomen el casco de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la Palabra de Dios. 18 Eleven constantemente toda clase de oraciones y súplicas, animadas por el Espíritu. Dedíquense con perseverancia incansable a interceder por todos los hermanos, 19 y también por mí, a fin de que encuentre palabras adecuadas para anunciar resueltamente el misterio del Evangelio, 20 del cual yo soy embajador en medio de mis cadenas. ¡Así podré hablar libremente de él, como debo hacerlo! 21 Tíquico, el querido hermano y fiel servidor en el Señor, los pondrá al corriente de cómo me encuentro y de lo que estoy haciendo. 22 Con este propósito, lo envié para que él les dé noticias nuestras y los conforte interiormente. 23 Llegue a todos los hermanos la paz, el amor y la fe, que proceden de Dios, el Padre, y el Señor Jesucristo. 24 La gracia permanezca con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con un amor incorruptible.

jueves, 7 de junio de 2012

Jesucristo ha resucitado de entre los muertos

Hermanos y hermanas, Jesucristo ha resucitado de entre los muertos, y es descendiente de David. Esta es la buena noticia que San Pablo nos comparte en el Evangelio de Hoy, y por predicar o propagar esta verdad él tuvo que sufrir y ser condenado como malhechor, para que entiendas que aún cuando él tuvo que estar encadenado a causa de esta fe, la palabra de Dios nunca ha estado encadenada, la palabra de Dios es libre, y en estos momentos llega a ti, para liberarte de la duda. En Jesús se obtiene la vida eterna. San Pablo se sacrificó por amor a nosotros, por amor a ustedes, por amor a los elegidos, a fin de que también alcancen la salvación y participen de la gloria eterna Esta doctrina es digna de fe: Si hemos muerto con él, viviremos con él. Ahora bien, fíjense bien en esto: Quiénes reciben la Gracia de la Revelación damos por echo esto, y no requerimos adherirnos a la Fe para creer en ello, pero la Palabra dice como consuelo: “Bienaventurados aquellos que sin haber visto creen, …” San Pablo continúa animándonos a ser constantes, porque si lo somos, entonces reinaremos con Jesucristo. Porque les escribo esto?. Por que San Pablo lo sugiere de este modo: “No dejes de enseñar estas cosas, ni de exhortar delante de Dios a que se eviten las discusiones inútiles, que sólo sirven para perdición de quienes las escuchan”. Hermanos y hermanas: Esfuércense por ser dignos de la aprobación de Dios, preséntense ante él como un obrero que no tiene de qué avergonzarse y como un fiel dispensador de la Palabra de verdad.

Católicos celebran hoy Solemnidad del Corpus Christi

Católicos celebran hoy Solemnidad del Corpus Christi