Comisiones de la Iglesia de Aysén afirman que descontento social es resultado de una crisis estructural del modelo económico vigente
En una declaración pública titulada “Algo nuevo está naciendo”, las comisiones “Justicia y Paz” y “Agua-Vida” de la Iglesia de Aysén dieron a conocer su reflexión ante la situación de crisis evidenciada en los últimos meses, a través de los movimientos sociales que se han alzado con diversas banderas de lucha.
El documento de seis puntos precisa que “Esta crisis es consecuencia de un modelo neoliberal que experimentamos como injusto, depredador y colonialista”. Además critica la Constitución vigente “que ha permitido poner en venta el país a las empresas transnacionales y a las familias chilenas que detentan el poder económico y comunicacional a través de la privatización de recursos vitales como el agua, las semillas, la minería, las zonas de pesca…”.
Al respecto, Jesús Herrero, miembro de las comisiones de la Iglesia de Aysén, apuntó que el momento de efervescencia social que vive Chile es el resultado de una crisis estructural del sistema vigente que hay que cambiar; pero también tiene que ver con la forma en que como sociedad nos relacionamos con el medio ambiente y en cómo se usan los bienes naturales. Todo esto provoca que las relaciones sociales y la paz social se quiebren.
“En esta declaración nosotros hacemos mucho hincapié en que la crisis es estructural y que por lo tanto tiene que ver con elementos importantes que hay que cambiar, porque hay que cambiar una estructura, pero también tiene que ver con lo tanto con nuestra relación con el Medio Ambiente y en general como estamos utilizando los recursos naturales, en concreto en nuestra región el agua, también está el cobre, la masa forestal, el tema de las zonas de pesca, etc. las malas relaciones antidemocráticas basadas en un modelo neo liberal que solamente busca el lucro y las utilidades están depredando la naturaleza y están haciendo que también nuestras relaciones sociales se quiebren y que la Paz social y que la Paz ecológica se vayan quebrando” manifestó Herrero.
“Algo Nuevo está naciendo”
Además, la declaración enfatiza que “algo nuevo está naciendo. Por lo tanto, no es extraño que en estos meses las bases sociales manifiesten firme, pacífica y democráticamente su indignación y rechazo al modelo neoliberal, no solo haciendo oír su voz, sino buscando, proponiendo y exigiendo cambios estructurales profundos en el sistema económico, político y social”.
Por su parte, Gloria Hernández, integrante de la Comisión Agua-Vida, reafirmó el compromiso de las comisiones de la Iglesia de Aysén con la defensa de los derechos fundamentales y del medioambiente, reiterando su adhesión con las luchas del Movimiento Patagonia Unida.
“En este momento histórico que vivimos nos comprometemos a aportar con humildad una palabra profética alentando la participación democrática en defensa de la justicia y de la Paz, la dignidad de las personas y del Medio Ambiente, por ello adherimos al movimiento ciudadano Patagonia Unida y a los movimientos sociales del País”, se refirió Hernández.
La Declaración de las Comisiones “Justicia y Paz” y “Agua-Vida” concluye dando su apoyo a la creación de una Asamblea Popular Constituyente “que elabore una nueva Constitución Política para Chile, en la que la defensa y el cuidado del medioambiente transiten por el desarrollo sustentable, y respete y promueva plenamente los derechos humanos, la justicia, la igualdad, la democracia y el bien común”.
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